The Callisto Protocol: a la altura del clásico que lo inspira?
Los primeros minutos de The Callisto Protocol nos emocionan por lo que puede pasar, pero, es capaz de mantener ese nivel? Te lo contamos en nuestra reseña.
El nuevo juego de Striking Distance arranca bien. Una historia que te genera interés, un personaje bien actuado que termina inmiscuido sin querer en una situación que lo deja preso, indefenso, enfrentando a criaturas poderosas. Buenos gráficos, buena ambientación, todo parece ir bien, pero con el paso de las horas, esa experiencia comienza a sufrir.
Como decíamos recién, hay varias cosas que el juego hace bien. Tecnológicamente, hace un buen uso de los recursos que tiene para brindarnos buenas animaciones e iluminación para crear un ambiente oscuro, claustrofóbico, opresivo, ideal para el tipo de historia que busca contar.
A medida que la introducción da paso a la acción, luego de transitar por pasillos destruidos sin saber qué se esconde en cada esquina o hueco de ventilación, a medida que los enemigos empiezas a mostrar la cara, así lo hacen algunos de los problemas de The Callisto Protocol.
Al igual que lo hizo en su momento Dead Space, el juego busca generar tensión con una cámara cercana, espacios chicos, oscuros y sonidos que complementan bien cada situación. A diferencia de ese juego, aquí hay ciertas decisiones de diseño que no funcionan bien.
El juego abusa de ciertas dinámicas. Por un lado, lo hace con los “jump scares”, lo cual hace que rápidamente pierdan su efectividad y tienen un efecto contrario al buscado. De la misma manera, hay una enorme cantidad de “quick time events” donde es, literalmente, inevitable perder vida mientras le das como un desquiciado a un botón. No inevitable porque ante ciertos ataques pierdas vida, sino porque son eventos establecidos, ataques que no vas a poder esquivar, donde es imposible evitar una situación y la pérdida de vida.
Independientemente de estas dos cosas, que pueden considerarse menores hasta cierto punto, los encuentros con los enemigos son probablemente el punto más bajo del juego. La acción se centra en los combates cuerpo a cuerpo, donde, gracias a tu lentitud y la rapidez de los enemigos, es clave esperar, evadir y atacar. Si te salís de esa dinámica, la vas a pasar mal. Como si fuese poco, cuando hay múltiples enemigos el sistema funciona peor todavía.
Habiendo dicho esto, y con el riesgo de parecer que nos contradecimos, aún con sus errores The Callisto Protocol es un buen juego, pero está muy lejos de la expectativa que generó. Con el paso del tiempo, vamos aprendiendo, cambiando, en lo posible, mejorando. Muchos de los desarrolladores detrás de Dead Space han trabajado en The Callisto Protocol y uno esperaría que toda esa experiencia se hubiese puesto en traer un juego mejor, similar pero diferente al clásico. Al final del día, The Callisto Protocol hace muchas cosas bien, pero parece estar empecinado en ser otro Dead Space, en lugar de superarlo y se queda corto.
The Callisto Protocol posee una gran ambientación, buenas actuaciones y una historia que arranca bien, pero a medida que progresa, se desinfla, empujado por una dinámica de pelea cuestionable, que termina perjudicando la experiencia general. Esperábamos un sucesor espiritual de Dead Space, uno mejor, pero sin ser un mal juego, no está a la altura de toda la expectativa que generó.