Preview: Medal of Honor: Above and Beyond

Tuvimos el privilegio de poder probar Medal of Honor: Above and Beyond antes de su lanzamiento y te contamos nuestras primeras impresiones de este título exclusivo para realidad virtual.

La primera gran franquicia de FPS militares no fue ni Call of Duty ni Battlefield, fue Medal of Honor, y marcó el camino a seguir por muchos años. Con Above and Beyond, Respawn Entertainment busca repetir la historia, ser nuevamente referentes siendo el primero de las tres franquicias militares con más historia en aventurarse en la realidad virtual.

El nombre Medal of Honor trae recuerdos de muchos buenos momentos y un enfoque diferente, donde se buscaba enseñar sobre la historia de la Segunda Guerra a través del entretenimiento. Muchos no lo saben, pero fue Steven Spielberg el impulsor del primer juego, en la época donde estaba filmando Salvando al Soldado Ryan, a través de Dreamworks Interactive, que luego sería comprado por EA donde la franquicia permanece hasta el día de hoy. Above and Beyond no se olvida en ningún momento de ese enfoque y redobla la apuesta más que nunca.

Aunque estamos trabajando en el review completo del juego, hoy podemos contarles algunos detalles, tanto de su campaña singleplayer como de su modo multiplayer y la Galería, su emotivo documental. El juego sale a la venta el 10 de diciembre y Oculus junto a Respawn están trabajando en terminar de afinar varios detalles que serán parte del parche de día uno, por lo que ciertos aspectos los dejaremos para el review completo para ser justos con el juego.

Empecemos por el singleplayer. El juego posee un prólogo y seis misiones, para este preview vamos a hablar de las primeras dos. Tu personaje es un ingeniero reclutado por la OSS (Office of Strategic Services), la precursora de lo que es hoy la CIA, que va a encontrarse recorriendo diferentes lugares de Europa y el norte de Africa, con misiones que buscan sabotear y ayudar a derrotar a los nazis. Como no podía ser de otra manera en su debut en VR, vamos a poder participar de algunos de los principales eventos de la guerra, como el desembarco de Normandía.

El juego busca dividir la experiencia en segmentos cortos, permitiendo a los jugadores descansos intermedios, algo que para los que ya tienen más tiempo jugando en VR, puede resultarles contraproducente, porque interrumpe un poco el flujo del juego y quita inmersión. La buena noticia es que a medida que avanzas en las misiones, estos segmentos son cada vez más largos y mejores. El juego definitivamente va de menos a más. Para nuestro gusto, tanto el prólogo como el comienzo de la primera misión que transcurre en Francia, tiene muchas interrupciones, pero a medida que te acercas al final de esta primera parte, la sensación se reduce y la acción es cada vez méjor. La segunda misión tiene de todo, peleas aereas, campos minados y bunkers, escapes en moto y el secuestro de un tren lleno de Nazis, no le falta nada. Ya desde el comienzo, poniéndote a bordo de un claustrofóbico bombardero B-17, que te va a quitar el aliento la primera vez que lo veas, tanto de afuera cuando comienza el nivel como desde adentro cuando tengas que pelear contra la Luftwaffe, marca el ritmo del capítulo y las mejoras del juego. Nos encantaría contarte más de la campaña, porque lo que sigue después es incluso mejor, pero vas a tener que esperar unos pocos días para conocer nuestro veredicto final.

De lo que podemos contarte es sobre el multiplayer, que cuenta con 10 mapas y varios modos de juego, muchos conocidos como Deathmatch, Team Deathmatch o Domination y otros que son variantes de modos populares, como Blast Radius que agrega una buena dinámica al King of the Hill donde una vez dentro de las zonas calientes te premia con más puntos por kills y te da lanza-cohetes Panzerfaust para hacer volar todo por el aire. El quinto modo disponible se llama Mad Bomber, donde todos los jugadores poseen bombas que deben hacer explotar, lo divertido es que podés escuchar el tic-tac de esas bombas, buscarlas y desactivarlas para evitar que tus enemigos sumen puntos. Al jugar en VR, podés ser muy creativo para plantar las bombas.

Pudimos participar de varias rondas de todos estos modos y nos divertimos mucho, la experiencia es muy diferente a los FPS “planos” a los que todos estamos acostumbrados, empezando por la forma de disparar y recargar tus armas, que transforma la experiencia en algo mucho más visceral. En este medio, no es tanto apretar botones para mover o disparar con tu personaje, sino que es uno mismo el que hace esas acciones, lo cual aunque cansa físicamente, abre las puertas para enfrentamientos completamente diferentes. Desde como te cubrís detrás de algo, como podés disparar a ciegas por sobre tu protección o a la vuelta de un pasillo sin exponerte, hasta por como tenés que apuntar un arma, todo es diferente. ¿Es mejor? Será cuestión de gustos, pero nosotros sin dudas lo disfrutamos.

Por último, vamos a hablarles de la Galería. Los que ya conocen la serie desde sus comienzos seguramente la recordarán. La Galería es la forma en que Medal of Honor honra a los veteranos de guerra y donde busca dar a conocer sus historias. A medida que avanzamos en la historia, varias emotivas entrevistas se fueron desbloqueando, y aprovechando la realidad virtual, podemos a través de videos en 360 grados visitar lugares icónicos de la guerra.

Como verán, nuestro primer contacto con Medal of Honor: Above and Beyond está lleno de buenas impresiones, con un juego que va de menos a más y que busca no solo ser entretenimiento. En nuestra reseña final, te vamos a contar sobre nuestra experiencia completa, de lo que hace bien y lo que puede mejorar, de cómo corre en diferentes configuraciones de hardware, algo que va a ser polémico por sus elevados requisitos, y muchos otros detalles. ¡No te la pierdas!