Hitman 3 VR Reloaded: jugando con un arma de doble filo

El debut de esta gran saga como exclusivo del Quest 3 muestra cómo querer ser fiel a una experiencia suma y complica las cosas en VR.

La franquicia de Hitman viene año tras año sumando fans, con una fórmula simple y muy efectiva. Tomando el rol del Agente 47, el asesino a sueldo pelado más querido del mundo, vas a tener que usar toda tu creatividad para eliminar objetivos de forma muy creativa, silenciosa y eficiente. Esto le da a la saga una rejugabilidad enorme.

Después de lanzar nuevamente la primera trilogía del juego y sumar soporte VR, ahora le toca el turno a una versión exclusiva para el Quest 3, que es la que estuvimos probando.

Si ya estuviste jugando a la saga, lo primero que vas a notar es que todo está fielmente recreado, esto es básicamente un port del último juego para darte la misma experiencia, pero en VR.

Este intento de lograr llevar exactamente todo al Quest 3 es un arma de doble filo. Se aprovecha todo lo aprendido en este tiempo, todos los refinamientos de la fórmula, pero también, hay muchas cosas que no son ideales para esta plataforma.

Empecemos por lo positivo. El gameplay sigue siendo tan bueno como siempre, divertido, especialmente cuando las cosas no salen 100% como lo planeas y se genera algo de caos. Esto es tan entretenido como cuando lográs que todo salga a la perfección. Una diferencia respecto al juego “plano” es que podés hacer “dual wield”, es decir, tener dos diferentes objetos en cada mano, haciendo las acciones más naturales, aprovechando la inmersión del VR.

Lamentablemente, esa misma inmersión muchas veces se termina rompiendo, gracias a ese doble filo de querer ser fiel al juego original. Si bien podés realizar varias acciones de forma libre como esperarías en cualquier juego VR y podés subir escaleras de forma “normal”, muchas otras acciones se logran únicamente al presionar un botón. Saltar, lanzar objetos, recargar las armas, son cosas que podrían haberse implementado de otra manera.

Si a esto le sumamos que gráficamente el juego no se ve bien, esa inmersión que debería ser un objetivo casi sagrado, se termina rompiendo más veces de lo que debería.

En ese enfoque de que esto sea un port 1:1 hubo que hacer varias concesiones para que todo corra de forma fluida y la solución fue bajar la calidad de texturas y el detalle. Aunque algunos hubiesen puesto el grito en el cielo, y significado un enorme trabajo para todo el equipo, haber elegido un estilo diferente, como suele hacer Nintendo en la no tan potente Switch, usando cel shading o algo estilizado, habría dado, a nuestro parecer, muchos mejores resultados.

En Hitman 3 VR Reloaded vas a encontrarte con el contenido original de Hitman 3, es decir, el juego base sin todo lo lanzado de forma posterior, como el modo Freelancer. Veremos si más adelante esto cambia, pero por el momento esperamos que el estudio se enfoque en mejorar la experiencia con parches que corrijan varios bugs así como implementar cierta funcionalidad específica para VR, que le daría un salto importante a la experiencia.