Devil Daggers: una guía para principiantes
Te damos algunos consejos para poder romper la barrera de los 100 segundos en este fantástico juego.
Devil Daggers es un juego muy especial. Parece inofensivo, pero es desesperante y frustrante, y por sobre todo, adictivo. Como seguramente le pasa a muchos, podemos estar tranquilos en nuestras casas cuando decidimos jugar unas pocas partidas, aprovechando su naturaleza rápida y llena de acción. Comienza la primera, 43 segundos, morís. Bueno, vamos de vuelta. 37 segundos, muerto. Otra vez. 49 segundos. ¿QUÉ? ¡VAMOS DE VUELTA! 45 segundos y aparece el grito, el de odio, seguido del grito de guerra. Vamos por más, esto no se queda así.
La verdad es que si no aprendemos ciertas dinámicas o recibimos algunos buenos consejos, es muy difícil poder llegar a un resultado medianamente aceptable. De la misma forma que alguien lo hizo conmigo, voy a ayudarte, no a que desaparezca la frustración, porque de eso se alimenta Devil Daggers, sino a poder romper la barrera de los 100 segundos, algo que al principio parece completamente imposible.
Bienvenidos a Suiza
Empecemos por algo que probablemente no sepas. En Devil Daggers no hay una real variedad en los enfrentamientos. Todo ocurre siempre en el mismo momento. Los enemigos son suizos, aparecen exactamente al tiempo establecido, no hay nada que puedas hacer para cambiar eso.
A los 3 segundos aparece el primer enemigo, a las 14, 19 y 24 segundos sus compañeros. A los 39 tu primer araña. Nada es al azar. Si te interesa ver la lista completa, podés consultarla aquí.
Esto significa que necesitas ser quirúrgico con tus ataques para tratar de tener una arena limpia lo más rápido posible y para eso, hay que entender a qué enemigos darle prioridad. Ya vamos a eso, pero antes hablemos de las mecánicas del juego.
Mecánicas: movimiento, disparos y gemas
Las mecánicas del juego son muy fáciles de entender. Usas el mouse para apuntar, botón derecho para disparar, botón izquierdo para saltar y las clásicas WASD para moverte. Hay solo dos tipos de disparos (1), si dejas el botón apretado, las dagas salen como una ametralladora. Si aprietas con pausas entre cada disparo, es como disparar con un shotgun. Pero esto seguro ya lo sabías, pasemos a lo importante.
La forma de nivelar tu arma es recogiendo gemas que dejan caer algunos enemigos al morir. El detalle es que mientras estés disparando, esas gemas se alejan, si dejas de hacerlo, se acercan. No te hace falta desviarte para ir a buscarlas, solo necesitas dejar de disparar un par de segundos y seguro las vas a recoger de forma automática. Con esto ya tenemos nuestra primera regla de oro: solo dispara cuando lo necesites. Las gemas solo duran 10 segundos y es clave poder recuperarlas para nivelar tus dagas y así sobrevivir más tiempo.
Hablando de los disparos, vale una aclaración. Los disparos no van exactamente adonde apuntas, hay un factor aleatorio que hace que las dagas no vuelen derecho. No sos vos, es el juego. Hasta los mejores jugadores tienen una precisión relativamente baja en Devil Daggers. Existen formas de contrarrestarlo, pero es algo que no se adapta a todos los estilos de juego. Lo más fácil es bajar la sensibilidad del mouse. Dependiendo de cada uno, puede ayudarte a ser más preciso o hacerte perder porque perdés la posibilidad de girar rápidamente para eliminar a enemigos a tus espaldas.
¿La solución difícil de lograr? Evitar tener enemigos en tu punto ciego. Empecemos por otra regla fundamental: nunca te podés quedar quieto. Hay que moverse siempre, pero hay que aprender a cómo moverse, o mejor dicho, hay que aprender a contrarrestar los patrones de ciertos enemigos que son los que te darán los principales dolores de cabeza.
Los enemigos y primeras etapas
Al estar enfocada a principiantes, esta guía va a cubrir tres tipos de enemigos, los Calamares (tipo I y II), Arañas y Calaveras (tipos I, II y III), que te harán la vida complicada hasta los 114 segundos.
Los Calamares son los responsables de llenar con Calaveras los niveles. Los primeros que aparecen, al estar espaciados en tiempo, son fáciles de matar. El truco es, apenas aparecen, apuntar justo donde comienzan los tentáculos que te garantizará eliminar el mayor número de Calaveras apenas aparecen. Estas primeras Calaveras tienen un patrón simple, que las dirige siempre hacia el jugador aunque de manera lenta. La regla aquí es nunca darle la espalda o escapar de ellas en línea recta, esa es una receta segura para el fracaso. Aunque pueda parecerte contra intuitivo, como se mueven en círculos y tienen un radio de giro amplio, lo mejor es correr hacia ellas y esquivarlas, con esto no solo vas a lograr una buena separación sino que tampoco vas a perder de vista a tus enemigos, algo clave en Devil Daggers.
Para eliminar al Calamar en sí, hay que apuntar a la gema visible. Otro detalle útil a saber que te va ayudar para saber hacia dónde moverte es que si te fijas bien, este y los siguientes Calamares siempre giran en el sentido de las agujas del reloj.
Ahora las cosas se ponen difíciles. A los 39 segundos, hayas matado o no a los primeros tres Calamares, aparecerán dos nuevos enemigos. Una Araña y un Calamar II. Tu mayor prioridad tiene que ser la Araña, así que empecemos a explicar sus puntos débiles.
La Araña puede ser un dolor de cabeza por varios motivos, aunque se mantiene al borde de la arena y no hace daño directamente, desde ese lugar capturará las gemas que no hayan sido recogidas evitando que puedas mejorar tu arma. Si sucede esto, va a transformar esa gema en un huevo que generará varios Spiderlings, que corren rápidamente y con patrones diferentes hacia ti. La única ventaja es que su color los hace fácil de diferenciar, pero al tener un hitbox pequeño y aparecer muchas veces en grandes cantidades, terminan siendo un gran problema. Apenas escuches a la Araña, tienes que enfocarte en ella. Su punto débil no solo es la gema sino arriba de esta por lo que es fácil de dañarla. El último detalle es que tiene la habilidad de protegerse, algo que hace cuando empiezas a fallar tus disparos o interrumpes el ataque.
Si habías logrado limpiar la arena completamente antes que ella apareciese, incluso deberías tener unos segundos donde podrías hasta detenerte frente a ella mientras la matas rápidamente. Empieza a disparar apuntando por sobre su gema y no te detengas, de esa forma evitas que se proteja y desaparecerá rápido, pudiendo concentrarte en el Calamar II y la Calavera III que ya debería estar cazándote.
Los Calamares II, aunque se mueven de la misma manera que los anteriores y no tienen diferencias a simple vista, te complican un poco más la vida. Aparte de poseer dos gemas para derrotarlos, lanzan Calaveras III, que te persiguen rápidamente y sin dar vueltas, con su característico sonido.
Si todo te salió como esperabas hasta ahora deberías tener 9 gemas, es decir, estás a una sola de nivelar tus dagas. Esta gema la puedes obtener de la calavera, que probablemente tu intuición te haga enfocarte en ella primero, o en el Calamar II. Mi sugerencia es que vayas por este último, y luego con el upgrade vayas por la Calavera que tiene bastante más vida que las anteriores.
Independientemente de a quién de estos dos mates primero, a partir de este momento tu prioridad debería ser eliminar los Calamares que llegarán en parejas, sin parar, desde los 64 hasta los 109 segundos. De esta forma, evitarás que sigan apareciendo más y más calaveras, ya que cada 20 segundos desde que aparece el calamar, liberan una nueva oleada.
Con práctica y siguiendo estos consejos, vas a ir logrando avanzar cada vez un poco más, superando los 100 segundos. No te desesperes si no lo logras rápidamente, Devil Daggers es un juego difícil, pero es parte de lo que lo vuelve tan atractivo. Es un juego que brilla con esa posibilidad de hacer partidas rápidas, intensas y que aunque todo está predeterminado te invita siempre a volver.
Notas:
(1) En realidad hay tres tipos de disparos, pero si lograste liberar el tercero en una corrida, primero tengo que felicitarte, segundo tengo que decirte que ya esta guía dejó de ser útil para tu nivel ; )