Dead Space Remake: mejor que el original?

Motive tuvo la difícil tarea de hacer un remake de un juego muy querido. Sin temblarle el pulso, propone cambios importantes al clásico del 2008 que abren el debate. ¿Es un mejor juego que el original?

En 2008, Dead Space nos deslumbró. Este survival horror donde la acción toma un rol principal, al estilo de Resident Evil 4, destacó con su historia, ambientación y enfoques que salían de lo tradicional. Siempre supimos que a los enemigos se los liquidaba rápidamente sin gastar municiones con un tiro en la cabeza, bueno, no aquí. 14 años después, EA decidió darle a Motive la tarea de hacer un remake, de esos que son divisivos en opiniones. ¿Hacía falta realmente? ¿Vale la pena pagar nuevamente por un juego que ya conoces de punta a punta?

Como lo hizo en su momento Half-Life a través de Gordon Freeman, parte del atractivo de Dead Space se centra en su protagonista. Isaac Clarke no es un soldado o un super-hombre, es un ingeniero que queda envuelto en una situación inesperada y que tiene que buscar la forma de sobrevivir a como dé lugar. El primer gran cambio del remake viene con este icónico personaje, que, en la entrega original, era un participante mudo de la historia. Al igual que se decidió hacer en su secuela, aquí Isaac habla, pero no de forma constante o para hacer comentarios innecesarios, sino para tener diálogos con el resto de los personajes. Los puristas, que más que un remake con modificaciones prefieren un remaster, no están de acuerdo con esto pero, para nosotros, el cambio resulta positivo, la historia se cuenta mejor de esta manera, incluso mejora la interacción entre otros personajes. Gunner Wright, al igual que lo hizo en las secuelas, interpreta nuevamente a nuestro héroe.

El otro gran cambio es tecnológico. Aunque un juego no tenga los mejores gráficos, con una buena iluminación se puede hacer magia para generar el ambiente correcto. En el caso de Dead Space, los buenos gráficos, sumados a un excelente uso de la luz, brindan una ambientación simplemente fabulosa. Esto, sumado al muy buen trabajo de sonido, en especial si lo disfrutas con auriculares, levanta la experiencia y te dará muchos momentos de gran tensión y miedo.

En cuanto a la jugabilidad, Motive también sumó muchos cambios positivos que fomentan la exploración y te impulsan a buscar misiones secundarias, aunque no sumen demasiado al juego si dan algo de contexto a lo que sucede a bordo del USG Ishimura, la nave a la que ahora se han sumado nuevos corredores para conectar diferentes áreas. No solo a pie se mejora el backtracking, sino que se cambió el funcionamiento del tranvía para que volver a otras secciones sea algo más sencillo. Si lo aprovechas, vas a poder ir encontrando más recursos detrás de puertas que antes no podías acceder.

La jugabilidad también mejora con cambios más sutiles, por ejemplo, las buenas indicaciones visuales del daño que estás haciendo a las extremidades de los enemigos, pueden resultarte algo muy útil cuando estás rodeado por una cariñosa multitud.

Motive se animó también a hacer cambios más importantes para eliminar las cosas que directamente funcionaban mal en el original, como las puertas que requerían ser abiertas con los nodos que usas para nivelar o la secuencia donde tenías que destruir asteroides, que, si bien permanece en espíritu, se juega de forma completamente distinta y deja de ser un sufrimiento. Otra cosa que ahora es radicalmente diferente son los momentos en gravedad cero. En el 2008, Isaac solo se movía en línea recta entre dos puntos, pero ahora, vas a tener completa libertad para flotar y moverte en estos niveles.

Algunas de las críticas que le han hecho a EA por este trabajo se centran en que podrían haber aprovechado para juntar al equipo original, en lugar de haber optado por el interesante estudio que nos trajo Star Wars: Squadrons. Después de haber jugador The Callisto Protocol, hecho justamente por una buena parte de ese equipo, creo que este punto pierde algo de fuerza.

El nuevo detalle gráfico y la iluminación son algo esperado en cualquier remake, pero el respeto al original junto a los cambios más profundos son los que hacen del Dead Space de 2023 un mejor juego que el original. La voz de Isaac y los ajustes en la historia, los cambios de algunas secuencias y cómo se incentiva la exploración, hacen que recomendemos a esta nueva versión como la ideal para jugarlo por primera vez o para revivir la gran experiencia que nos enamoró en 2008.