Doom, curiosidades del clásico que cambió todo

Hoy se cumplen 25 años del lanzamiento de Doom, un juego que marcó un antes y un después para toda una industria. Estas son algunas curiosidades del clásico de clásicos.

Hace 25 años, después de nueve meses de trabajo con un equipo de 15 personas, id Software publicaría un inocente archivo de 2 megas llamado doom1_0.zip que le iba a explotar la cabeza a millones de personas. Doom no habrá sido el primer First Person Shooter, pero si fue el responsable de popularizar el género que iba a dominar el mercado por muchísimos años.

Hay pocos juegos tan influyentes como Doom, que marcaron un antes y un después tan dramático en la industria de los videojuegos, al punto que hoy, tantos años después, sigue siendo un referente.

A modo de homenaje a ese juego que me volvió loco en su momento, les dejo algunas curiosidades que tal vez no conozcan.

El juego iba a ser muy distinto a lo que terminamos conociendo. Primero se había pensado en tratar de licenciar los derechos de Alien, para hacer un juego basado en la película, pero las charlas con Fox terminaron muriendo. Después el enfoque, al menos en papel, y tal cual Tom Hall plasmó en la Doom Bible, iba a ser mucho más rico en cuanto a historia y complejidad. Se buscaba presentar 5 personajes jugables, cada uno con su historia y habilidades especiales, pero fue John Carmack el que terminó descartando muchas de esas ideas. Se dice que Carmack llegó a decir que “la historia en un juego es como la historia en una película porno, se espera que esté allí pero no es tan importante”. 

El único personaje del Doom que conocemos y amamos terminó siendo un Space Marine que no tenía ni nombre. Siempre lo conocimos como Doomguy, pero dos años después de su lanzamiento, en una novela llamada Knee-Deep in the Dead, lo bautizarían Flynn "Fly" Taggart.

Algo curioso es el origen del nombre del juego que seguramente no adivinarías nunca aunque te den mil oportunidades. El mismo Carmack confesó en una entrevista en 1997 que lo tomaron de una escena de la película “El Color del Dinero”, de Scorcese, donde Tom Cruise tiene un taco de pool personalizado. Al preguntarle “Qué tienes ahí?” éste responde “Doom”. Por suerte ese fue el nombre del juego y no el primero que se les ocurrió que era "Attack Of The Attackers".

Como era casi una tradición, eventualmente el código fuente de Doom fue publicado de forma libre. Es por eso que hoy es hasta casi una obligación moral tratar que funcione en cualquier dispositivo posible. Doom ha corrido en impresoras y hasta calculadoras. Pero tal vez el port más interesante fue liderado por alguien muy conocido. Doom 95 fue usado como punta de lanza para mostrar que el sistema operativo de Microsoft era la mejor plataforma para jugar, y era lógico que trataran de usar ese juego, porque se estimaba en esa época que había sido instalado en más PCs que el mismo OS de Redmond. ¿Saben quién se encargó de liderar el equipo? Nada más y nada menos que Gabe Newell, que en esa época trabajaba para MS. Los más viejos van a recordar seguramente un video de Bill Gates donde simulaba entrar al juego para hablar del mismo.

En 2005 salió una película horrible protagonizada por The Rock y Karl Urban, que muchos ya seguramente olvidaron o van a tratar de hacerlo después que se los recordase, pero lo que pocos saben es que unos años antes, en 1999, estuvo a punto de hacerse una película con nada más y nada menos que Arnold Schwarzenegger. La tragedia de Columbine frenó esos planes, ya que uno de los autores era un asiduo jugador de Doom y los medios se dedicaron a hacer lo que siempre hacen…

Hoy mucho ha cambiado, pero para la época fue novedoso como se crearon los enemigos del juego. Primero se hicieron modelos de arcilla, luego fueron digitalizados para después poder llevarlos al juego. Algo similar sucedió con las armas, que se modelaron basadas en pistolas de juguete de Toys “R” Us. La inspiración para los enemigos viene de películas como Alien y The Evil Dead y Dungeons & Dragons. Por ejemplo, es difícil no ver similitudes entre el Cacodemon y un Beholder.

 

A muchos de nosotros Doom nos marcó a fuego, hoy han pasado muchos años desde que por primera vez nos enfrentamos a las hordas de demonios pero su marca sigue estando presente, tanto como el primer día. Como dijo John Carmack “Doom no era algo que podías jugar un rato y olvidarte que lo hubieses jugado alguna vez. Hicimos nuestro trabajo bien, porque han pasado muchos años desde que lo escribimos. Hicimos una marca en las personas, dejamos un impacto. Era algo que a la gente le importaba.”