Destiny 2: Forsaken (y la pelea por recuperar a los fans)
Forsaken busca revertir un mal sentimiento que los fans más acérrimos de Destiny 2 tienen con el juego. Bungie puso toda la carne al asador pero... ¿será suficiente para enamorarnos de nuevo?
Hubo una época en la que jugaba Destiny prácticamente todos los días. Junto con el resto de mi fireteam disfrutamos haciendo las mismas misiones mil veces. Destiny logró lo que pocos juegos eran capaces: nos atrapó a mí y a miles de jugadores con una dinámica de juego que simplemente funcionaba. Con Destiny 2 se introdujeron algunos cambios que no cayeron muy bien que digamos con la comunidad y la cantidad de jugadores empezó a caer drásticamente mientras que las quejas aumentaban cada día.
Forsaken busca cambiar por completo ese sentimiento y se nota que Bungie le ha dedicado mucho tiempo para que esta expansión recobre parte de esa magia que el juego tenía antes. La gran pregunta ahora es:
¿Todo esto es suficiente para retener el interés después que terminas la nueva historia? Por lo que estuvimos jugando todo indica que están muy cerca de lograrlo, les voy a contar porqué.
La campaña single player, impecable
Para armar la historia de Forsaken los muchachos de Bungie hicieron la gran Stephen King. Agarraron al personaje que más quiere la gente, el más carismático y lo mataron como a un perro… Cayde 6, el Deadpool de este juego, fue ejecutado mientras hacía una misión contigo y es por eso que vas a dejar de lado todo lo honorífico que significa ser un guardián para ir en plan de venganza a buscar a Uldren Sov y sus Barones.
Forsaken es algo más oscuro que las anteriores historias y por suerte la forma de contarla está mucho mejor estructurada que otras expansiones. En las más de 8 horas que te podés tardar en tachar a todos los responsables de tu lista, Destiny muestra una nueva cara con misiones más variadas y dinámicas de boss fights más que interesantes. Para llegar a la pelea final vas a tener que hacer una alianza impensada y encontrar la ubicación de 8 Barones, cada uno de ellos con características únicas que hacen sus enfrentamientos únicos.
Esta nueva expansión transcurre en The Reef, que los jugadores del primer juego recordarán, y casi todas las misiones son en una nueva y gran zona llamada The Tangled Shore, un conjunto de asteroides que se mantienen juntos por ganchos y cadenas donde coexisten Fallen, Hive y Cabal, junto a una “nueva” raza, los Scorn, que son una variación de los Fallen con dinámicas de pelea diferentes. Algunos lo discutirán, pero para mí califican como nueva raza, algo que le venimos pidiendo a Destiny hace rato.
Como ha sido siempre hasta ahora, el nivel de diseño y ambientación de los niveles es impecable, la música calza perfecto con la acción y los cut-scenes son excelentes, en especial los del principio con Cayde luchando contra los Scorn. La forma en que armaron el DLC se siente mucho mejor que antes, no parece que estuvieses haciendo misiones colgadas y la historia fluye mucho mejor.
De lo que más me gustó en Forsaken fue que los nuevos enemigos premian al tirador certero. Si estás acostumbrado al rifle automático y disparar a lo loco vas a tener que ajustarte un poco a la nueva dinámica. Para los que disfrutamos las pistolas, este DLC está mandado a hacer.
¿Y después?
Los cambios que implementó Bungie no solo aplican a la forma en que contó la historia de venganza de nuestro guardián, sino que afectan a todo el juego.
Después de cazar a Uldren, que ya nos caía mal desde el primer juego, vas a poder acceder a una nueva zona llamada The Dreaming City. Ahora si voy a aplicar mi política de cero spoilers y solo les voy a decir que es una zona de patrulla bastante distinta a las que conocemos, con eventos variados y diseñada para jugadores que están por arriba del límite blando de luz de 500 puntos.
De los que si les puedo hablar y muy bien es de Gambit, el nuevo modo de juego multiplayer que debuta con Forsaken. La mejor forma de describirlo es diciendo que es un híbrido que combina aspectos de PvE y PvP. Cada equipo de 4 está separado en un mapa donde enfrenta distintos tipos de enemigos, al matarlos estos dejan caer motas que se pueden depositar en un “banco” para alcanzar cierto nivel y acceder al boss que permite ganar la ronda. La cosa se pone interesante porque las motas al ser depositadas en mayor cantidad permiten bloquear el banco del otro equipo o abrir portales para invadir. El modo de juego es simplemente excelente, pero brilla cuando lo jugás con amigos, porque una buena estrategia y comunicación hacen una diferencia abismal.
El juego está lleno de cambios pero para los más veteranos seguirá siendo familiar en muchos sentidos. Probablemente para los nuevos jugadores o los que teníamos tiempo sin jugar es un poco abrumante la cantidad de ítems, monedas u objetos que tiene el juego, pero aunque no les prestes atención vas a nivelar a toda velocidad hasta llegar a 500. Eso sí, cuando llegas a ese nivel vas a necesitar a Google para saber qué hace cada cosa. El juego se volvió algo complicado en este sentido y es un punto que Bungie debería mejorar o simplificar un poco.
El endgame sin dudas parece ser más interesante, en especial porque ahora hay bounties para todo pero muchos de ellos se resetean todos los días, con lo que genera algo nuevo para hacer cualquier día y no de forma semanal como antes, donde los que más jugaban terminaban todo lo que había para hacer en una noche y desaparecían hasta el reset.
Lo que Bungie se debería dignar a implementar es una forma de rejugar una campaña o niveles específicos de ella, especialmente para los jugadores que usaron un boost para poder desbloquear Forsaken de una vez, cosa normal si venís de haberlo jugado en otra plataforma. Las campañas son cada vez mejores pero no hay forma de volverlas a jugar a menos que quieras crear un personaje desde cero.
¿Todo esto alcanza?
Cuando empecé el análisis me preguntaba si todo esto iba a ser suficiente para mantener el interés en el juego una vez que la gente terminase la muy buena historia de Cayde y tendría que decir que si lo es. Forsaken tiene muchas horas de contenido, un nuevo y genial modo multiplayer, corrige varias de las críticas y da desafíos diarios para incentivarte a volver por más. El problema es que tanta gente abandonó este mundo que convencerlos de volver no será tarea fácil.