Blade and Sorcery: Nomad
El mejor sandbox para PCVR llega al Oculus Quest 2. Lo estuvimos probando sin las ataduras de cables y te contamos nuestra experiencia.
Después de tres años capturando momentos geniales en PC, Blade & Sorcery, uno de los mejores sandboxes VR, llega al Oculus Quest 2. Estuvimos blandiendo nuestra espada y disparando hechizos de forma anticipada para contarles si vale la pena comprarlo.
Si sigues las noticias de las experiencias VR seguramente a esta altura ya te debes haber cruzado con varios videos de Blade & Sorcery. Ya sean en el estado original de este sandbox medieval, enfocado en el melee y la magia, que pone a la física por delante o por sus incontables mods.
Por el momento, en su versión para el HMD independiente de Facebook, contamos con el primero de estos dos aspectos que lo destacan. Pero no desesperen, el estudio indie WarpFrog promete que dentro de un tiempo los mods llegarán también a esta versión.
Lo importante es que la base del juego, que tanto nos divirtió en su versión más potente, llega prácticamente intacto al Quest 2. Gráficamente obviamente existe una clara diferencia, pero lo importante, las físicas y el contenido, están ahí. No importa donde lo juegues, vas a encontrarte con encuentros viscerales, con resultados a veces caóticos, pero que nunca dejan de ser entretenidos.
La clave de esa diversión es que todo en Blade and Sorcery está regido por la física. No esperes agarrar un Claymore con una sola mano y poder hacer algo, o mover tu arma como un abanico como sucede en otros juegos más arcade y hacer daño. Aquí hay que pegar con ganas, saber burlar la guardia de tus enemigos y estar atento para bloquear golpes. Una vez que entiendes eso, el juego te atrapa por completo.
Parte de la magia es que el enfoque del juego permite que lo encares como quieras, no hay una fórmula secreta, una forma correcta de jugarlo. Todo enfoque puede ser letal, es cosa tuya como te paras, el tipo de armas que uses o la forma en la que atacas o defiendes. Como buen sandbox, todo se trata de libertad.
El problema con los sandboxes, del que también sufre Blade and Sorcery, aunque de forma temporal, es que el incentivo por volver a jugarlo no viene dado por una progresión, una aventura que se abre. Si bien los calabozos permiten jugar de forma lineal, con enemigos al azar, la principal razón por la que vas a volver es por la diversión, por pelear nuevamente con hordas de enemigos buscando hacer las cosas de forma diferente, siendo cada vez más creativo en la forma en que despachas magos y caballeros.
Si, ya se, suena a psicópata encontrar tanta diversión buscando formas creativas de matar enemigos, pero bueno, dejemos esa discusión para otro momento : )
Aclaré que este “problema” es algo temporal porque en 2022 el juego recibirá una actualización, tanto en PC como en esta versión, que agregará un nuevo modo que suma progresión, con la posibilidad de desbloquear ítems e ir encontrando loot en diversos calabozos.
Entre el modo de juego que brindará progresión y el soporte de mods, Blade and Sorcery: Nomad alcanzará todo su potencial. ¿Te estoy diciendo que esperes para comprarlo? ¡No! Hoy ya es un gran juego, con su pulido sistema de físicas y un foco en la libertad, donde el límite lo da tu creatividad, te va a dar decenas de horas de entretenimiento. Eso sí, el año que viene, más vale que no te olvides de cargar tu Quest 2, porque no vas a querer esperar ni cinco minutos para poder sumergirte en este juego.
